La parodia de como recibir sin merecer. La ironía de estar rota y querer arreglarlo todo.
Parece triste, pero es peor.
Vivir engañando a tus seres queridos, con una sonrisa de oreja a oreja permanente, y ahogar a tu almohada en lágrimas cuando te quedas sola. Intentar expresarlo, y contenerte por miedo a que sea contagioso.
Que te coma por dentro... Que te desgarre como un perro hambriento, y aún así levantarse, mirarte al espejo cada mañana y decir: "un día mas y aquí sigo, yo gano".
Este sentimiento de soledad absoluta que te hace creer que de verdad nadie podrá querer lo que hay dentro de ti porque es todo fachada. Realmente todo esta en ruinas.
Mirar y ver sonrisas vividas y preciosas, y llegar a sentir envidia de ellas, porque esa es tu máxima aspiración: sonreír, y que no sea por compromiso. Creer que no puedes querer porque tienes el corazón tan podrido que ni los gusanos podrían vivir ahí. Llorar hasta quedarte sin tus demonios interiores.
¿Qué te queda, cuando ni si quiera te tienes a ti mismo? ¿Cómo hacer que esos gusanos se conviertan en mariposas? Y mas importante aun, ¿cómo hacer que sobrevivan a tu invierno?
A pesar de la hipotermia, quiero diciembres contigo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario